Imágenes de Pixabay
Microrrelatos-Levitación
El sueño de una niña.
La niña siempre soñaba con levitar cuando algún ente le perseguía. Alzaba sus alas y a lo más alto subía, y desde la altura del cielo, veía como tras de ella el engendro le perseguía.
Ahora sabe que solo eran sueños de niña. Algo malo le tuvo que ocurrir para soñar a menudo con la misma pesadilla. Por suerte, siempre del sueño salió ilesa, el monstruo, nunca la pudo alcanzar, gracias a la Luna y a su afán de levitar.
Ahora no necesita echarse a dormir para soñar con esos entes, ni engendros, ahora, ya no moja la cama... ¡Pero los sigue viendo! y habla, y ríe con ellos, les saluda "buenos días" Pasan cerca de ella, y también en la lejanía. Ahora más mayor, comprueba que, en la tierra pululan. Están ahí, siempre están ahí.
Me gusta ese tipo de microrrelato, breve, por eso se le llama micro-relato, pero no solo por ser cortito, que además, en su brevedad, tiene que decir mucho, y con un final inesperado, un micro que no es lo que parece.
Como no es mi fuerte, de tarde en tarde edito alguno.
Gracias a todos.
¡¡Besos!!
Como no es mi fuerte, de tarde en tarde edito alguno.
Gracias a todos.
¡¡Besos!!
Me ha gustado em relato y me ha hecho recordar ese deseo interno que siempre tuve de poder levitar y cuantos sueños he tenido sobre el tema pero no me perseguían monstruos aunque si me elevaba por el cielo y lo disfrutaba hasta que despertaba....ahora hace tiempo que ya no lo sueño.Besicos
ResponderEliminarAhor charo, los verdaderos verdaderos monstruos no los vemos en sueños, nos los cruzamos a diario, los tenemos a nuestro alrededor y algunos pasan desapercibidos, a esos son a los que hay que temer.
EliminarBesicos y feliz noche amiga.
El producto de los sueños y la infancia... ¡Cuánto esconden...!
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo que vivimos a diario, Rafael, es la pesadilla más horrible que podemos tener.
EliminarBesos y feliz noche
Hay sueños que se repiten y cuando eres niño forman parte de tu ser, luego, te das cuenta de que no son reales pero se esconden en la mente para quedarse.
ResponderEliminarUn abrazo como siempre.
Son otros sueños Airblue, los que vivimos a diario, y no son sueños, son realidad.
EliminarUn fuerte abrazo amiga.
Besos
Sueños que luego se recuerdan cuando ya no hay la candidez inicial.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es en el día a día ,ahí esta el monstruo que hay que temer.
EliminarUn abrazo Alfred.
Feliz noche.
alucinante viaje astral...
ResponderEliminarSí, alucinante lo que vivimos, ahí están los monstruos que nos quieren deborar.
EliminarBesos Chante.
Una pena que olvidáramos todo lo que de niños comprobamos que existe...
ResponderEliminarMe encantó, Carmen. Agrazo grande!!
La pena es lo que estamos viviendo a diario, en la vida real es donde esta el monstruo que debemos temer.
EliminarEstán ahí, pululan por todo rincón.
Besos Carlos.
A los monstruos que de verdad hay que temer son a los que están pululando a nuestro alrededor. Y es con los años cuando nos damos cuenta que, a veces, es la vida la auténtica pesadilla.
ResponderEliminarMuy bueno y profundo, querida Carmen. Un placer leerte.
Abrazos, y feliz semana 💙
Ahí te quería yo ver Ginebra, has llegado al fondo del micro.
EliminarSi amiga, hay quien hay que temer es al hombre, esos monstruos están ahí, pululan por todo lugar.
Cuando somos mayores, los miedos son más horribles que en la infancia.
Feliz noche.
Un abrazo amiga.
Los años de nuestra bendita infancia y ¡cuánto nos acordamos de ella! Un abrazo Carmen.
ResponderEliminarPues sí JAGL, esos sueños que nos aterrorizaban, porque siempre nos estaban diciendo, se buena que el hombre del saco te va a llevar...
EliminarAhora la niña ya mayor, sigue viendo los monstruos, pero estos más horribles, pasean día a día.
Un abrazo y feliz noce.
Hola Carmen.. !Ah! los sueños, yo creo que siempre tienen algo de realidad, me encante una frase que la aplico a mis propios Blogs.. Una ficción no es una mentira, una ficción es una historia que parte de una realidad.. Hacen falta sueños para aferrarse a la realidad.
ResponderEliminarUn abrazo..
Hola Llorenç, esa niña como todo niño tenía pesadillas, ahora ya mayor, sigue viendo los monstruos por todo lugar, esa es la verdadera pesadilla.
EliminarFeliz noche llorenç
Un beso
Muy bonito el micro-relato.Me ha recordado algunos sueños de mi niñez en los que podía volar y burlaba el peligro o la persecución de alguien mediante esa facultad que yo sola tenía. Pero si, a veces los sueños se combierten también en terribles pesadillas.Un abrazo, Carmen.
ResponderEliminarSi Rita esos sueños esos miedos, ahora ya es otra cosa, el miedo se lo tenemos a los vivos.
EliminarUn beso y feliz día.
Hola Carmen! Llevo tiempo sin aparecer porque estuve de viaje.
ResponderEliminarMe estoy poniendo al día con lecturas y comentarios.
Me ha encantado tu micro,es tan tierno, tan delicado!
Un gusto leerte de nuevo!
besos!
Bienvenida luna de nuevo, te echaba de menos.
EliminarMe alegro de tu vuelta.
Un besazo
Al menos en sus pesadillas de niña podía volar. Cuando crecemos se nos van cortando las alas. Sin embargo, los monstruos siguen ahí
ResponderEliminarBesos
Sí Alis, así es, ahora aunque volemos los verdaderos monstruos los tenemos muy presente en el día a día.
EliminarFeliz semana amiga.
Un beso.
Si tuviera que valorar tu microrrelato, apreciada Carmen, no al cien por cien, pero si al setenta por cien lo valoraría, puesto que por un lado tiene una gran riqueza poética e imaginativa, tan solo le falta darle más fuerza o más impacto en el final, pero por lo demás ¡bravo!.
ResponderEliminarTe animo a seguir adelante, porque ya verás lo sencillito que resulta y no lleva mucho tiempo. Figúrate que hay micros de siete palabras, como el famoso de Augusto Monterroso:
«Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí.»
Un beso y feliz noche.
Pues muchísimas gracias amiga Estrella por ese siete, por ese aprobado, seguiré en ello par subir la puntuación, un poquito más alto.
EliminarGracias siempre por tu presencia y saber estar y por supuesto por tu valoración.
Un besazo amiga Estrella.
Pues escribe más, es un micro estupendo, tiene una bonita narración y la sorpresa final. Ojalá pudiéramos elevarnos por encima de los "monstruos" callejeros. Abrazos
ResponderEliminarOjalá Ester, y pudiéramos elevarnos y alejarno aquí en tierra de esos engendros.
EliminarUn fuerte a brazo.
las experiencias que vivimos en la infancia se quedan muy grabadas, y a veces nuestra mente las hace aparecer en los sueños. conservamos una parte de los niños que fuimos, con las mismas ilusiones y los mismos miedos. no dejemos que los monstruos nos asusten...
ResponderEliminarbesos!!
Sí chema muy grabadas, pero se superan, ahora yo le tengo miedo a los vivos.
EliminarPero seamos fuertes ante esos monstruos de la tierra.
Feliz semana amigo.
Un beso.
Los sueños infantiles,son ilusiones que tenemos en esa edad tan dulce,aunque a veces se conviertan en pesadillas.
ResponderEliminarLA realidad de los años,nos llevan al miedo del presente y sus circunstancias.Miedo por las guerras,las hambrunas,los maltratos,las dictaduras ,el poder corrupto...
Ese miedo sí que nos lleva a levitar ,a temblar.Pero si denunciamos,aunque no acabe ,algo haremos por mejorar ,que falta hace!
Tu micro es interesantísimo y además,siempre tienes un toque humanitario en todo lo que escribes
Felicidades por tu humanidad!!
Besucos linda
Gó
Muchas gracias Gó por tus palabras.
EliminarDenunciemos amiga, denunciemos...
Un fuerte abrazo.
Los sueños nos muestran tantas hermosas imágenes como tu relato, muy bueno.
ResponderEliminarAbrazo
Los sueños, como dijo el poeta sueños son, soñemos de día y hagámonos más fuertes para hacer frente a los verdaderos monstruos.
EliminarGracias lanochedemedianoche.
Un beso
Me gusta mucho leerte en este género y además con moraleja que dice mucho y aprendemos más .
ResponderEliminarAsí pues amiga al menos ponte como tarea hacer una a la semana kajaaj por lo menos .
Un fuerte abrazo y levitemos que cuando estamos en las nubes vemos todo lo que ocurre allá abajo en la tierra .
Me animas Campirela, y me alegro de que te guste, estoy en ello para mejorar.
EliminarTodo se puede mejorar en esta vida.
Pues sí, levitemos.
Un gran abrazo.
Me gustó mucho,cariños.
ResponderEliminarGracias Fiaris.
EliminarUn fuerte abrazo y feliz semana.
No digas que no es tu fuerte. A mí sí que me ha gustado.
ResponderEliminarBesos.
No lo es, Macondo, así lo siento, me cuesta más que hacer unos versos, un poema.
EliminarPues seguiré en ello, me animas amigo.
Un beso.
ASi es, siempre están, siempre han estado. NO son mentira. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarHola Carlos, siempre están ahí, es una realidad a la que se le tiene cierto yuyu.
EliminarFeliz semana amigo.
Un beso
Tienes creatividad y sensibilidad también en la narrativa, magia que nos haces deleitar leyendote, Muchas gracias, querida Carmen.
ResponderEliminarUn beso.
Muchas gracias querida mari carmen por los ánimos que me inyectas.
EliminarFeliz semana, un besazo.
Bonito relato Carmen. Yo a eso de levitar le tengo miedo..... Saludos y abrazo amiga.
ResponderEliminarYo en la niñez, si que recuerdo haber levitado en algún sueño.
EliminarFeliz semana Sandra.
Un besazo.
Es un micro muy bonito. Los miedos infantiles dan para muchos relatos con mensaje. Como este tuyo
ResponderEliminarUn abrazo
Así es Albada, la niñez da para mucho a la hora de escribir y de mejorar en edad adulta, somos pasado sin el no seriamos nada.
EliminarUn besazo amiga.
Corto y directo. Complejo para dejar volar la imaginación.
ResponderEliminar¿Quién no ha soñado con ser esa niña? Es un relato melancólico con destino al pasado más profundo y agradable de nuestro ser.
Enhorabuena por escribir tan bien.
Atentamente,
Un diario personal más
Muchas gracias Antoni por tu lectura y tiempo, agradezco muchísimo tu compañìa.
EliminarUn gran abrazo amigo.
Los monstruos están al acechando siempre.
ResponderEliminarBesos, Carmen, levitemos.
Así es Verónica, y así lo he intentado transmitir en este humilde micro.
ResponderEliminarFeliz semana querida amiga.
Un besazo.